En estos tiempos que corren es complicado ver a un niño con un libro, que no sea del cole, en las manos. Lo más normal es verlos con pantallas en sus pequeñas manos. Desde bien pronta edad los videojuegos y los teléfonos móviles son lo que les llama la atención y con lo que suelen entretenerse. No es que sea malo, al menos no del todo, pero bueno tampoco es.
Por otra parte, la escuela, los deberes y las actividades extraescolares que hacen cada día les ocupan mucho tiempo. Cuando llegan a casa lo que menos les apetece es coger un libro para pasar un buen rato. Esto no es culpa de los peques, realmente es culpa de la sociedad que les rodea. Todavía no saben, porque probablemente nadie les ha contado, que un libro puede ser la manera más divertida de pasar el rato. Además, leer es un hábito muy beneficioso, y en los niños es fundamental para:
- Aumentar su vocabulario y comprender mejor el lenguaje.
- Ampliar su creatividad e imaginación.
- Ayudar a su concentración.
- Mejorar su expresión haciéndoles más sencilla la comunicación con su entorno.
- Ayudarles a descubrir sus propios gustos y forjar su propia personalidad.
- Aprender a ponerse en el lugar de otro, en este caso, los personajes, desarrollando así la empatía.
- Ejercitar el cerebro y entrenar la memoria.
Como vemos todo lo que puede proporcionar la lectura es bueno para ellos. La lectura de cuentos y libros es una forma divertida y entretenida para educar a los más pequeños de la casa. Como no todos los peques son iguales lo único que puede resultar más complicado es encontrar el libro adecuado para cada uno. Siempre hay un libro para un niño.
Pautas para promover la lectura
A continuación te dejamos unos consejos para promover la iniciativa de los más pequeños en el mundo de la lectura.
- Promueve el contacto con el libro desde el principio para que lo vean como algo natural.
- Crea un ambiente adecuado para la lectura
- Instala un rincón en algún lugar de la casa o en su propia habitación donde ellos encuentren y guarden sus libros.
- Leer al menos 15 minutos todos los días.
- Estimula sus sentidos, déjales que puedan descubrir cosas nuevas, tocar, sentir, oler… y todo eso lo puede proporcionar un libro.
- Léele en voz alta, contar un cuento es algo motivador para los peques.
- Anímale a participar de la lectura comentando el cuento que han leído.
- Regálale libros, que vean que un libro es un premio.
- Enseña con el ejemplo, a los niños les encanta imitar lo que ven.
- Propón algunos juegos desde la lectura, como dibujar, recortar imágenes…
- Llévale a conocer una biblioteca. Ahí el niño puede buscar sus libros favoritos, aprender donde colocarlos, devolverlos…, es un lugar ideal para que los niños puedan investigar.
Un libro es uno de los mejores amigos que puede tener un niño y de los que durará para siempre.
Mariona Riera
Soñadora e idealista pero con los pies en el suelo y con una visión muy clara de la realidad. Quizás sea toda una paradoja en sí misma que traduce en una insana curiosidad por todo lo que la rodea.